SAN GIL. Con el título de Florentino Hernández Girbal, un cineasta y escritor machadiano, el escritor Andrés Sorel ha completado la biografía de tan ilustre bejarano.
Al final de una larga vida de esfuerzos, trabajo y sufrimientos, Girbal quiso que todos sus bienes permaneciesen en Béjar, su ciudad natal, repartidos entre diferentes entidades y asociaciones públicas y privadas de la localidad. El Grupo Cultural San Gil recibió una parte de ese legado y, como primer fruto del mismo, ha publicado esta biografía.
El texto hace un recorrido de la vida de Girbal por las ciudades que le acogieron: Béjar, Medina del Campo, Valladolid, Badajoz, Madrid, Barcelona y de nuevo Madrid, con el intermedio de los establecimientos penitenciarios en los que estuvo recluído durante cuatro largos años. El autor nos describe el paisaje y el ambiente de esos lugares en la época en que los habitó Girbal, contextualizando las vivencias personales del biografiado.
Entramos así, de lleno, en el mundo del cine español de las primeras décadas del siglo XX, donde Florentino desarrolló todo tipo de actividades, para introducirnos después en el ambiente de la guerra, la cárcel y la clandestinidad. A partir de los años 60, una vez rehabilitado, recorreremos los mentideros de la Villa, los ambientes literarios, el éxito editorial de sus publicaciones y la llegada del reconocimiento a su persona. Y más tarde, el reencuentro con sus paisanos en forma de homenajes por parte del Casino Obrero y del Grupo Cultural San Gil, así como el nombramiento de Hijo Predilecto de la ciudad.
No faltan en estas páginas sus recuerdos autobiográficos, algunos de los cuales están escritos, con letra temblorosa, en los últimos años de su vida, a los noventa y siete años. Ni la velada y discreta presencia de su esposa Mª Iglesias Clavero, Maruja, compañera de viaje y apoyo moral en los tiempos difíciles.
El diseño de la portada del libro es obra de José Muñoz Domínguez.
El Grupo Cultural San Gil hará una presentación pública de la biografía en los próximos días.