Ayer, 11 de septiembre, arrancó la campaña en la Denominación de Origen Protegida Sierra de Salamanca. Los primeros viñedos en vendimiarse han sido Valle Oscuro (Garcibuey), El Pocito y Los Parrales (Villanueva del Conde). Estas fincas son cada año las que inician la recolección debido a su bajísima producción de uva, 800 kgs/Hectárea, y su orientación Sur. La uva cosechada ha ido destinada a la bodega Viñas del Cámbrico de Villanueva del Conde.
A lo largo del próximo mes se irán sumando las bodegas inscritas en la DOP: Bodegas Valdeáguila, Vinos La Zorra, Bodegas y Viñedos Rochal, Bodegas Antonio Aparicio y la Cooperativa San Esteban.
La variedad recolectada ayer fue la Rufete, autóctona de la Sierra, que madura antes que la Tempranillo y la Garnacha, las otras dos variedades tintas aceptadas en el Reglamento de la Denominación.
La uva se irá recolectando escalonadamente por municipios y parcelas a medida que vaya alcanzando su punto óptimo de maduración. Lo habitual es que se vendimia primero la Rufete, seguida de la Tempranillo y la Garnacha; por municipios el orden es: Villanueva del Conde, Garcibuey, Sotoserrano, Molinillo, Santibáñez de la Sierra y San Esteban de la Sierra.
Este año la cosecha se prevé de una gran calidad, debido a la ausencia de precipitaciones y a las noches frías del último mes. Estas dos características climáticas han propiciado un excelente estado sanitario de las uvas; así como una maduración lenta y adecuada para la elaboración de vinos de alta calidad.
A lo largo del próximo mes se irán sumando las bodegas inscritas en la DOP: Bodegas Valdeáguila, Vinos La Zorra, Bodegas y Viñedos Rochal, Bodegas Antonio Aparicio y la Cooperativa San Esteban.
La variedad recolectada ayer fue la Rufete, autóctona de la Sierra, que madura antes que la Tempranillo y la Garnacha, las otras dos variedades tintas aceptadas en el Reglamento de la Denominación.
La uva se irá recolectando escalonadamente por municipios y parcelas a medida que vaya alcanzando su punto óptimo de maduración. Lo habitual es que se vendimia primero la Rufete, seguida de la Tempranillo y la Garnacha; por municipios el orden es: Villanueva del Conde, Garcibuey, Sotoserrano, Molinillo, Santibáñez de la Sierra y San Esteban de la Sierra.
Este año la cosecha se prevé de una gran calidad, debido a la ausencia de precipitaciones y a las noches frías del último mes. Estas dos características climáticas han propiciado un excelente estado sanitario de las uvas; así como una maduración lenta y adecuada para la elaboración de vinos de alta calidad.